Comunicado Oficial: Misa Tridentina Prohibida en Costa Rica

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Comunicado Oficial
- A los Católicos Perplejos de Costa Rica y Amigos del Exterior - 

El motivo de este comunicado es dar a conocer de forma resumida la situación en Costa Rica, particularmente en la Arquidiócesis de San José,  en relación con la Santa Misa de Siempre, también llamada Misa Tridentina, Misa Tradicional en Latín o Forma Extraordinaria del Rito Romano.

Una Voce Costa Rica, miembro de la Foederatio Internationalis Una Voce, agrupación con aprobación de la Santa Sede, ha venido trabajando en los últimos años para que todos los católicos de Costa Rica puedan disfrutar de aquello que en la carta que acompaña al Motu Proprio Summorum Pontificum de S.S. Benedicto XVI se le llamó: “un tesoro precioso que hay que conservar”.

Antiguo Arzobispo
Mons. Hugo Barrantes

Desde finales de 2010, en aquel entonces como Agrupación San Pío V y hoy en día como Una Voce Costa Rica, contactamos a varios sacerdotes diocesanos que se encontraban muy interesados en aprender a celebrar la Santa Misa y que se motivaron más cuando comprobaron que era una iniciativa seria, y que la misma era impulsada en su mayoría por jóvenes. Desde un inicio consideramos muy importante poner nuestro proyecto bajo el cuidado pastoral de nuestro señor Arzobispo (Su Excelencia Hugo Barrantes) y por ello le contactamos y pedimos una audiencia, la cual tuvo lugar a finales de 2011. El Señor Obispo fue breve. Básicamente nos conoció y nos dijo que buscáramos a sacerdotes interesados. Eso hicimos y unos tres meses después solicitamos una segunda reunión donde le  presentamos un listado de sacerdotes, al mismo tiempo que le notificamos que teníamos todos los implementos básicos para la celebración (Misal, Sacras, etc). El Señor Obispo en esa misma reunión designó al Padre German Rodriguez (Párroco en las afueras de San José) como supervisor para todo lo relacionado a la Misa.

Misa en Escazú
(a puerta cerrada, en secreto)

Iniciamos ensayos junto con los sacerdotes interesados para aprender a celebrar la Santa Misa. Luego de muchos días y mucho tiempo invertido uno de ellos (el Padre Jose Pablo Tamayo) se sentía completamente preparado para celebrar y así procedimos a tener la primera Misa, en la Iglesia La Merced (donde nos encontrábamos ensayando). Desde ese momento empezaron los problemas con varios sectores del clero, al punto que no teníamos sitio para celebrar (ni aún cuando celebrábamos de forma totalmente privada). Se nos dijo que La Merced era solamente para ensayos y no para Misas reales, y así la que sería nuestra segunda Misa se canceló minutos antes de iniciar. Fue ahí cuando el Padre German nos facilitó un altar lateral en su parroquia siempre y cuando fuera en día sábado y a puerta cerrada. Nadie debía enterarse de lo que ahí ocurría, al grado que inclusive fuimos

Primera Misa en La Merced
(a puerta cerrada, en secreto)

amonestados una vez por llevar mucha gente (en su mayoría amigos y familiares). También se nos pidió que no diéramos a conocer fotos. Inicialmente pensamos que la diócesis quería prudencia y tener seguridad de que la Misa se estaba celebrando correctamente (lo cual es una preocupación válida y sabia, que cualquier persona con amor a la liturgia debería tener). Pasaron los meses, existía una perfección en la forma de celebrar, comprobada inclusive por un sacerdote de la Fraternidad Sacerdotal de San Pedro (Padre Kenneth Fryar, FSSP ) y la situación no cambió.  Tampoco tuvimos nunca el privilegio de tener presente en dichas Misas al Padre German, delegado del Obispo y párroco de esa iglesia, pues él se retiraba a sus labores cuando iniciábamos.  

Actual Arzobispo
Mons. José Rafael

Luego de varios meses y viendo que habían muchos fieles interesados pero que no se les permitía asistir, solicitamos por medio de una carta al Padre German Rodriguez que se nos permitiera celebrar de forma pública al menos todos los domingos del mes, y en una Iglesia en la ciudad capital, y no en las afueras como hasta el momento se había dado (para facilidad de todos los fieles que venían de todo el país). También expresamos que podría perfectamente ser a una hora donde no hubiera Misa para no afectar así los horarios que ya existían. Nunca recibimos respuesta a esta carta. Volvimos a solicitar al menos dos veces más y tampoco recibimos respuesta. Al no haber comunicación efectiva con el sacerdote delegado del Arzobispo, decidimos de nuevo volver a contactar directamente a Monseñor Hugo Barrantes. Lo tratamos de contactar por medio de cartas (de las cuales tenemos copia sellada) al menos tres veces sin recibir respuesta alguna. En enero 2013 entregamos de forma personal (un miembro de Una Voce Costa Rica viajó al Vaticano) el expediente detallado y completo de todas las cartas y demás pruebas a la Pontificia Comisión Ecclesia Dei. A mitad de año (ya con el Papa Francisco) el señor Leo Darroch, Presidente de la FIUV, tuvo una reunión en la Comisión Ecclesia Dei y confirmó que tenían nuestro expediente. Hasta el día de hoy (Marzo 2014) no tenemos respuesta alguna ni del Arzobispo, ni de Ecclesia Dei, ni de ninguna otra autoridad. También a finales de Agosto, cuando asumió las riendas de la diócesis el nuevo Arzobispo, Monseñor José Rafael Quirós, le contactamos y de nuevo jamás obtuvimos respuesta alguna a nuestras cartas.

De forma general también hemos sido testigos del como ningún párroco se atreve a autorizar la Santa Misa sin el permiso expreso del señor Arzobispo, aún cuando tienen el permiso general que otorga la ley de la Iglesia (desde Quo Primum Tempore hasta Summorum Pontificum). Tampoco ningún sacerdote, con la excepción de uno, se atreven a celebrar el rito tradicional si no existe autorización del Arzobispo, aún cuando la ley de la Iglesia es enfática al decir que no se requiere de ningún permiso de ningún superior.

Cabe mencionar que antes de la primera reunión con el Señor Obispo, un sacerdote de

Padre Mark WIthoos

Ecclesia Dei, el Padre Mark Withoos, había visitado el país en sus vacaciones por invitación de varios fieles tanto de nuestra agrupación como del exterior. La Santa Misa que él celebraría fue cancelada a última hora, y luego de una reunión con el Arzobispo se le confirmó que solo podría celebrar en privado y sin la participación de los fieles que habían sido originalmente invitados a la que habría sido una Misa pública.

Debido a todo lo anterior los fieles en Costa Rica no pueden gozar por medio de la arquidiócesis del tesoro espiritual que es la Santa Misa de Siempre, tesoro que tienen derecho de recibir, tesoro que no puede ser prohibido por ningún arzobispo, creándose así un estado de necesidad escandaloso y sin precedentes en la historia de la arquidiócesis. En nuestro país existe una prohibición silenciosa, de facto, contra la Misa que vivieron todos los santos, desde San Gregorio Magno, a San Francisco de Asís, al Cura de Ars, y culminando con el Padre Pío. Una Voce Costa Rica seguirá luchando para que las normas y leyes de la Iglesia se cumplan en nuestro país, teniendo siempre en mente que la ley suprema de la Iglesia es la salvación de las almas.

Hacemos de las palabras de San Atanasio nuestra esperanza:

“Que Dios os consuele. He sabido que no sólo os entristece mi exilio, sino sobre todo el hecho de que los otros, es decir los arrianos, se han apoderado de los templos por la violencia y entre tanto vosotros habéis sido expulsados de esos lugares. Ellos, entonces, poseen los templos. Vosotros, en cambio, la tradición de la Fe apostólica. Ellos, consolidados en esos lugares, están en realidad al margen de la verdadera Fe, en cambio vosotros, que estáis excluidos de los templos, permanecéis dentro de esa Fe. Confrontemos pues qué cosa sea más importante, el templo o la Fe, y resultará evidente desde luego, que es más importante la verdadera Fe. Por tanto, ¿quién ha perdido más, o quién posee más, el que retiene un lugar, o el que retiene la Fe? El lugar ciertamente es bueno, supuesto que allí se predique la Fe de los Apóstoles, es santo, si allí habita el Santo. Vosotros sois los dichosos que por la Fe permanecéis dentro de la Iglesia, descansáis en los fundamentos de la Fe, y gozáis de la totalidad de la Fe, que permanece inconfusa. Por tradición apostólica ha llegado hasta vosotros, y muy frecuentemente un odio nefasto ha querido desplazarla, pero no ha podido; al contrario, esos mismos contenidos de la Fe que ellos han querido desplazar, los han destruido a ellos... pero, repito, cuanto mayor es el empeño de éstos por dominar la Iglesia, tanto más están fuera de ella. Creen estar dentro de la verdad, aunque en realidad están excluidos de ella, prisioneros de otra cosa, mientras la Iglesia, desolada, sufre la devastación de estos supuestos benefactores”

(Extracto de la Carta de San Atanasio a los Católicos que Sufrían en Manos de los Herejes Arrianos)

San Pío V, rogad por nosotros.

San Pío X, rogad por nosotros.

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Debido a la prohibición de-facto contra la Misa de Siempre, informamos a los Católicos apegados a la tradición en nuestro país que pueden buscar ayuda espiritual y los Sacramentos por medio de la recién fundada misión de la noble Fraternidad Sacerdotal San Pío X (más información aquí), que es actualmente la única forma de poder vivir la Misa Tradicional en Latín. Una Voce Costa Rica mientras tanto continuará en su misión de procurar que la Misa también sea ofrecida por medio de la Arquidiócesis según el derecho de los Católicos consagrado en Summorum Pontificum.

Official Communiqué: Tridentine Mass Banned in Costa Rica

[para la traducción al Castellano pincha aquí]

Official Communiqué

- To the Confused Catholics of Costa Rica and Abroad -

The purpose of this statement is to present a summarized report of the situation in Costa Rica, particularly in the Archdiocese of San José, in relation to the Mass of Ages, also called the Tridentine Mass, Traditional Latin Mass or Extraordinary Form of the Roman Rite.

Una Voce Costa Rica, member of the Foederatio Internationalis Una Voce, a federation with recognition from the Holy See, has been working in recent years for all Catholics in Costa Rica to enjoy what in the letter accompanying the Motu Proprio Summorum Pontificum of His Holiness Benedict XVI was called "a precious treasure to be preserved " .

Former Archbishop
 Hugo Barrantes

Since late 2010, first as the “St. Pius V Group” and today as Una Voce Costa Rica, we contacted several diocesan priests who were very interested in learning to celebrate the Mass, and who became even more motivated when they realized it was a serious initiative, and that it was driven mostly by young people. From the beginning we considered very important that our project be placed under the pastoral care of our Archbishop (His Excellency Hugo Barrantes) and therefore we contacted him and asked for a hearing, which took place in late 2011. The bishop was brief. He basically told us to look for interested priests. We did it and about three months later we requested a second meeting where we presented a list of priests, while at the same time we let him know that we had all the basic things needed for the Mass (Missal, Altar Cards, etc). In that second meeting the Bishop appointed Father German Rodriguez (a Parish priest from outside San Jose) as supervisor for all things related to Traditional Mass.

Mass in Escazú
(closed-doors, secret)

First Mass at La Merced
(closed-doors, secret)

We began rehearsals with the priests interested in learning to celebrate Mass. After spending many long days one of them (Father Jose Pablo Tamayo) felt fully prepared to celebrate and so we proceeded to have the first Mass at La Merced Church (where we had our rehearsals). Since that very moment problems started with various sectors of the clergy, to the point that we had no place to celebrate (even when we were celebrating in strict privacy). We were told La Merced was only for rehearsals and not for a real Mass, and our second-to-be Mass was cancelled some minutes before it began. At that moment Father German facilitated us a side altar in his Parish Church at Escazú as long as Masses took place on Saturdays and in strict privacy. No one had to find out what was happening there. One day we were even reprimanded for inviting a lot of people (mostly friends and family). We were also asked not to make any pictures available to the public. We initially thought that the diocese wanted prudence and to be certain that the Mass was being celebrated properly (which is a valid and wise concern, and anyone who loves the liturgy should have it). Months passed, and we were ready to celebrate. The priest was perfectly ready, and this was verified by a priest of the Priestly Fraternity of St. Peter (Father Kenneth Fryar, FSSP ) and the situation did not change. We also never had the privilege of having Father German in any of our Masses (and he was the delegate of the bishop and Parish priest of the church we were using), as he always retired to his duties when we began.

Archbishop
Jose Rafael Quiros

After several months and seeing that there were many faithful interested but were not allowed to attend, we requested through a letter to Father German Rodriguez to allow us to publicly celebrate at least every Sunday of the month, and in a Church in the capital city, and not in the outskirts (for the ease of all the faithful who came from all around the country). We also mentioned that it could perfectly be at a time where there was no Ordinary Mass in order to not affect existing schedules. We never received a reply to this letter. We tried to contact him again in at least two more occassions without any answer. In the absence of effective communication with the delegate priest of the Archbishop, we decided to contact Archbishop Hugo Barrantes directly. We tried to contact him through letters (of which we have stamped copies) at least three times with no response. In January 2013 we personally delivered (a member of Una Voce Costa Rica travelled to the Vatican) the full detailed record of all letters and other evidence to the Pontifical Commission Ecclesia Dei. Around mid-year (now with Pope Francis ) Mr. Leo Darroch, President of the FIUV, had a meeting at Ecclesia Dei and he was able to confirm that they had our file. Until today (March 2014) we have had no reply from the Archbishop, or Ecclesia Dei, or any other authority. Also in late August, when Monsignor José Rafael Quirós took charge of our Archdiocese, we tried to contact him again and we never got any reply to our letters.

In general we have also witnessed how no parish priest dares to authorize the Mass without the express permission of the Archbishop, even when they know they have the general permission granted by the law of the Church (from Quo Primum Tempore to Summorum Pontificum). Additionally, no priest (with the exception of one) dares to celebrate the traditional rite without the approval of the Archbishop, even though the law of the Church is emphatic when it states that they do not require any permission from any higher authority.

Father Mark Withoos

It should also be mentioned that before we had our first meeting with the Archbishop, a priest from Ecclesia Dei, Father Mark Withoos, visited our country on his vacation time at the invitation of several faithful from our group and some outsiders. The Mass that he was going to celebrate was cancelled at the last minute, and after a meeting with the Archbishop he was told that he could only celebrate in private and without the participation of the faithful who had originally been invited to what should have been a public Mass.

Due to this situation, the faithful in Costa Rica can not enjoy through the Archdiocese the spiritual treasure of the Holy Mass, a treasure they are entitled to receive and a treasure that can not be prohibited by any archbishop, thus creating an outrageous state of need, unprecedented in the history of the archdiocese. In our country there is a silent ban, a de facto ban, against the Mass that sanctified all of our saints, from St. Gregory the Great, to St. Francis of Assisi, to the Curé d'Ars, and culminating with Padre Pio. Una Voce Costa Rica will continue to fight in order for the rules and laws of the Church to be respected and implemented in our country, keeping always in mind that the supreme law of the Church is the salvation of souls.

We make Saint Athanasius words our hope:

" May God comfort you. I know moreover that not only this thing saddens you, but also the fact that while others have obtained the churches [the Arian heretics] by violence, you are meanwhile cast out from your places. For they hold the places, but you the Apostolic Faith. They are, it is true, in the places, but outside of the true Faith; while you are outside the places indeed, but the Faith, within you. Let us consider whether is the greater, the place or the Faith. Clearly the true Faith. Who then has lost more, or who possesses more? He who holds the place, or he who holds the Faith? Good indeed is the place, when the Apostolic Faith is preached there, holy is it if the Holy One dwell there. (After a little:) But ye are blessed, who by faith are in the Church, dwell upon the foundations of the faith, and have full satisfaction, even the highest degree of faith which remains among you unshaken. For it has come down to you from Apostolic tradition, and frequently has accursed envy wished to unsettle it, but has not been able. On the contrary, they have rather been cut off by their attempts to do so...  However really, then, they seem to hold the church, so much the more truly are they cast out. And they think themselves to be within the truth, but are exiled, and in captivity, and gain no advantage by the church alone. "
(Excerpt from the Letter of St. Athanasius to Catholics Suffering at the Hand of Arian Heretics )

Saint Pius V, Pray for Us.

Saint Pius X, Pray for Us.

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Due to the de-facto ban against the Mass of Ages, we inform traditional Catholics in our country that they may seek spiritual assistance and the Sacraments from the newly-established mission of the good Priestly Fraternity of Saint Pius X (more info) which is currently the only way to have access to the Traditional Latin Mass. In the meantime, Una Voce Costa Rica will continue working in order for the Mass to also be offered by the Archdiocese according to the right of Catholics which was enshrined in Summorum Pontificum.

Aclaración al Eco Católico

Estimados fieles de Costa Rica interesados en la Misa de Siempre, también llamada Misa Tridentina, Misa Tradicional o Forma Extraordinaria de la Santa Misa, y que es celebrada por varios sacerdotes en nuestro territorio.

En el número de marzo de 2014 del Eco Católico, el periódido oficial de la Iglesia en nuestro país, menciona en su página 6 lo siguiente al respecto de la Misa de Siempre:

 

Sentimos que es necesario aclarar lo siguiente y solicitamos de forma respetuosa que también lo haga el Eco Católico, en estricta fidelidad a la verdad:

1- No es necesario ni es una condición especial que los fieles conozcan el latín. Nunca en la historia de la Iglesia, a lo largo de dos mil años, ha sido esto un requisito ni lo es ahora. Cabe mencionar que las lecturas de la Santa Misa (Epístola y Evangelio), así como la homilía, se realizan en castellano. También es importante mencionar que en las Iglesias donde se celebra la Misa de Siempre se suelen dar "misalitos" para los fieles, con las oraciones en latín y castellano para aquellos que deseen seguir el rito de la Santa Misa.

2- Para participar en la Santa Misa basta saber lo que es la Santa Misa (El Santo Sacrificio del Señor) y unirse místicamente a la celebración. No es necesario ser un letrado, un experto en liturgia, ni mucho menos. Bastaría, por ejemplo, rezar el Santo Rosario o algunas otras preces para oír con fruto la Misa, con tal que se procure buenamente seguir las ceremonias del Santo Sacrificio.

3- El Sacerdote que "preside" (celebra) tampoco requiere ser un experto en la lengua latina. Basta tener un conocimiento suficiente que permita pronunciar correctamente las palabras y entender su significado. Tampoco es necesario ser un experto en liturgia. Basta con tener un cierto nivel de formación litúrgica que permita celebrar dignamente el Santo Sacrificio.

4- También recordamos que todos los sacerdotes del rito latino tienen el derecho de celebrar la Santa Misa de Siempre en cualquier momento, sin necesidad de permisos de sus obispos o superiores, según lo recordó el Papa Benedicto XVI.

San Pío V, 

Rogad por nosotros.

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